Mucho se ha hablado de los valores de las personas y su formación. A diferencia de lo que la mayor parte de las personas consideran, ser hijo de un personaje inmerso en la historia politica de Quintana Roo no es una tarea sencilla. Mucho se cree respecto a la bonanza que el hijo de cualquier politico o empresario pueda vivir, pero jamás se conoce de fondo lo realmente difícil que es crecer, los reflectores están más incisivos, más exigentes y son más severos.
Jorge Martín Alvarez, regidor joven electo del municipio de Solidaridad tiene ese gran reto y los "lobos" lo han estado acechando, adulando y algunos simulando que no lo adulan pero cínicamente utilizándolo. Sin embargo Jorge Martín tiene una formación propia y un criterio que madura, que está presto al aprendizaje y, pese al debate de opiniones, tiene un padre diestro y hábil.
Quienes minimizan a Jorge y Miguel Martín no conocen del conocido dicho de "no hay enemigo pequeño"; ellos no buscan enemigos; nadie los buscamos, muchas veces llegan solos. Cuidado, Miguel Ramón no está sólo. Jorge Martín menos.
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