Por Jonathann Estrada y Talina González
Por ser esposa de quien es –Jorge Acevedo Marín, un connotado periodista que ha dirigido diarios exitosamente– es conocida con el nombre de "Carmita Acevedo", al estilo gringo, sus amigas la bautizaron con el apellido del cónyuge y así la llaman. Su personalidad es afable, un poco introvertida en un inicio pero muy abierta cuando le brindas confianza. Ella es una mujer soñadora que siente principal orgullo por su realización como mujer y madre. Desde poco antes del 2004 emprendió una tarea que quizás ella misma no consideró que haría muy bien: "Dama Voluntaria".
A ella no le gusta del todo que la relacionen públicamente con actos partidarios, sin embargo es bien conocida su labor en el grupo de "Damas Voluntarias" que han impulsado las principales tareas con la ex Primera Dama, Narcedalia Martín de González y actualmente con la señora Mariana Zorrilla de Borge. Es una activista innata, en ella no te convencen los simples argumentos sino esa personalidad humana que ancla tus sentidos a los de ella.
Este es un fragmento de la entrevista que publicaremos en la revista MÁAX del mes de marzo:
–¿Quién es "Carmita Acevedo"?
–Llevo más de 25 años en Cancún, terminé mi carrera de odontología en la ciudad de Mérida, en la UADY, mis papás vivieron acá en la época del auge de las importaciones, para su sorpresa regresé a vivir a Cancún y al poco tiempo ellos se regresaron a Mérida. Cancún es el destino que me ha realizado como mujer y mamá. Me casé aquí, tuve a mis hijos y me volví parte de la sociedad de Cancún.
–¿Profesionalmente te sientes realizada?
–Aunque en mis estudios de odontología no continué formalmente, para mí lo que hago es profesional y en este rubro me siento realizada. Ejercí tres años mi carrera académica en Cancún. Al nacer mi hijo, el mayor, le detectan asma y me tuve que avocar a encontrar un tratamiento y un médico que nos ayude. En aquel entonces no había en Cancún especialistas y de alguna manera mi realización como mamá me fue llevando a dejar poco a poco la carrera hasta que crecieron mis hijos. Sin embargo disfruté mi profesión, fui dentista del ISSSTE y de manera particular.
–¿Qué es lo que más recuerdas de ese Cancún de antaño?
–Bueno, pues era hermoso, en ese entonces Jorge y yo éramos novios y teníamos un grupo de amigos que ahora ya todos están diseminados; algunos siguen aquí tocando puertas en Cancún para recuperar la ciudad que era antes, era padrísimo porque nos íbamos juntos todos los domingos a la playa, también podías andar a altas horas de la noche sin temor a ser asaltado o secuestrado, y después de la disco a las 3 o 4 de la mañana te ibas a desayunar a un restaurante que se llamaba "Chilinski", está cerca de "Plaza Cancún 2000", pero ahora lo piensas hasta para dar permiso a los hijos .
–Estamos acostumbrados a verte trabajar con el voluntariado, platícanos qué es lo que te inspira a trabajar ahí.
–Mira, no se trata de algo necesariamente circunstancial o político, este gusto por el servicio a la comunidad inicia desde hace muchos años, desde que mis hijos empiezan a ir a la escuela fui por ocho años miembro del comité de padres de familia y tuve la oportunidad de hacer muchas cosas para beneficio del colegio, de los alumnos y al mismo tiempo de las familias. Mi condición de mamá me circunscribía a esa faceta. De alguna manera siempre he buscado la forma de cómo ayudar a los demás.
–¿Siempre has estado en la parte del voluntariado?
–La verdad es que sí, me gusta la asistencia social, tuve la gran oportunidad durante seis años de participar activamente en ello, también fui presidenta de una asociación llamada "Becas de Amor" en la que becábamos a niños de bajos recursos, que desgraciadamente ya desapareció, porque todo el mundo se involucró en trabajos distintos y cambió la situación económica de mucha gente y pues la agrupación debió cerrar. Entré a trabajar directamente a la asistencia social y con ello abrí una brecha en mi vida.
-La verdad estoy muy agradecida con Noemí: es una gran persona, lindísima con sus empleados, muy comprometida con la sociedad, y trato de ayudar o estar siempre al pendiente de lo que se necesite. Es un honor permitirme ser parte de la labor que realiza. Cuando Jorge inicia en el periodismo, me inicio con él porque no conozco esa parte de su trabajo y me gusta; cuando él inicia en la política yo decía que no era para mí, pero entonces comprendí que la política tiene vertientes muy buenas, tiene un lado altruista que me identifica y es en donde yo me enfoco. Me gusta ayudar y participar en todo, bueno, casi todo, porque hay un lado de la política que no es mi referente. Yo me enfoco más en lo altruista y social.
–¿Qué es lo que más te atrae del altruismo?
–Fíjate que me dieron la oportunidad de involucrarme con la gente que tiene niños con discapacidad, con los del CRIT a nivel nacional, somos amigos de Chovi Landeros y nos dio la oportunidad de tener un acercamiento, la otra vez me enseñaba mi marido un mensaje de un joven que esta súper agradecido porque a través de él y de mí tuvimos la oportunidad de ayudarlo a estudiar su carrera de derecho, y es un chavo que está agradecido y cada que le dan el apoyo mensualmente le manda mensaje a Jorge. Los niños con discapacidad son niños muy inteligentes, y por algo Dios te los manda, es un tema que me gusta mucho. Otro punto que para mí está muy presente es que un grupo de amigas queremos formar una fundación para las mujeres maltratadas, no se ha podido lograr pero esperamos se nos haga realidad, queríamos hacerlo pero no hemos llegado con la gente que nos pueda ayudar, creo que la violencia familiar muchas lo padecen, y no ayudar a esas mujeres hace que todos en la sociedad también padezcamos. Me encantaría otro proyecto que se quedó en veremos y es un albergue para ancianos que pertenezca al DIF, en realidad Cancún es una ciudad que está creciendo mucho y sus habitantes aumentan, ¿tienes idea cuantos adultos mayores hay?, existen muchísimos, son gente que sufre mucho ya que hay infinidad de casos que se quedan en el olvido, la Ciudad de la Alegría, por ejemplo, está llenísima, nunca hay espacio, creo que es el único lugar. Hay uno más que está en la supermanzana 15 y que por cierto los vecinos se quejan, aunque en realidad no dan lata, abuelitos, son adultos mayores y aparte de estar hermoso es un lugar en donde se entretienen y se sienten útiles.
Carmita Acevedo ha develado un poco de su ser, su personalidad y de sus sueños. No la pierdan de vista porque esa esencia la está proyectando a altos niveles. No se pierdan la continuación de esta entrevista en la revista de sociales y cultura MÁAX.
No hay comentarios:
Publicar un comentario